Sociacarcia e sociodrama : uma proposta de transição

ORIGINS OF SOCIOCRACY

WHY A SOCIOCRACY?

Following almost a century of political revolutions in which monarchies and aristocracies were overturned or stripped of power, Comte was searching for a rational basis for government. Governance on the basis of inherited rights, personal wealth,  religious dictates, and military power had all proven corruptible and not in the interests of the people.

Comte had developed a philosophy called “positivism” in which knowledge is based on what is known of the natural world, of what could be proven and not what a monarch or the church decreed.  He believed that a society governed by scientists could use scientific method to  decide the best social and economic policies.

THE ORIGINS OF THE IDEA

The origins of sociocracy began in the mid-nineteenth century with French philosopher Auguste Comte who had developed sociology, the study of people in social groups. The root word for both “sociology” and “sociocracy” is the Latin, socius, which means associates or companions. The suffix “-ology” means the “study of” as in archeology, psychology, etc. The suffix “-ocracy” means “to govern,” governance by associates, companions.

LIMITATIONS OF AN IDEAL

Sociology remained an ideal, however, because Comte was a philosopher, a theorist. Implementation would need the rhetorical skills of a political critic and an educat

Sete Encantamentos

¿Te gustaría aprender a hacer magia…

…en tu consultorio, en tus clases, en el hospital, en la comunidad donde trabajas?

¿Has pensado que tu trabajo no tiene porqué ser tedioso, serio, engorroso…

…que podría ser una aventura cada momento que pasas con un grupo, con un paciente, con tus alumnos?

Imagina una puerta, imagina su tamaño, su textura, su color, dale todos los detalles que se te ocurran. Puede ser una puerta giratoria, moderna, de vidrio; puede ser antigua, de madera tallada, puede ser como tú quieras. Ábrela con cuidado, porque la puerta te lleva a un espacio mágico, el espacio dramático, que ahora está allí, en tu imaginación.

Es el espacio del “como si”: como si allí estuviera la pradera de África a la que quieres viajar con tus alumnos de geografía, como si ese fuera el patio de la casa de la infancia de tu paciente, como si esa fuera la empresa del futuro que la empresa donde trabajas quiere construir.

El “como si” es la varita mágica del psicodrama. Es magia buena, magia noble, magia científica si quieres, porque podrás fundamentar cada uno de los pasos que des en el camino de convertirte en el aprendiz de esta magia, la del psicodrama.

Primer encantamiento: del relato a la escena

El más simple de los encantamientos del psicodrama es el de agregar imágenes a las palabras. Es simple y efectivo.

Cuéntame algo. Si eres psicólogo cuéntame algo que te pasó, chiquito o grande, en relación a tus sentimientos, Cuéntame algo que te puso triste, o alegre, o enojado, o que te entusiasmó.

Si eres maestro, cuéntame algo que quieres enseñar a tus alumnos, o algo que te pasa con ellos, una dificultad o un logro en la enseñanza. Si trabajas en comunidades o en una institución o una empresa, cuéntame algo que quieres hacer allí.

Ya te escuché, te escuchaste. Todas las historias que tenemos los seres humanos para contar son emocionantes.

Ahora toma la varita mágica del psicodrama que te estoy ofreciendo y ponle al relato un escenario. Muévete en él. Siente la temperatura, el olor. Estás dentro de la imagen o de la escena como dentro de una película. Deja que transcurra lo que está pasando. Escucha lo que te dicen, responde.

¿Descubriste algo más de lo que me habías contado? La dramatización de imágenes y escenas siempre agrega algo que no está en el relato.  Ese algo puede ser crucial para tu trabajo.

Por supuesto hay que saber hacerlo. Es un encantamiento que aprenderás con nosotros. Aprenderlo no será un duro trabajo, será a veces interesante, a veces divertido, otras veces emocionante. Podrás darle imagen y color a las palabras que te cuenten. Podrás descubrir lo que las palabras no dicen, con la magia del psicodrama.

Segundo encantamiento: ponte en mi lugar

Seguramente has oído esta frase: “ponte en mi lugar”, o “deberías ponerte en sus zapatos para ver qué se siente”. La frase es buena, pero no es tan fácil hacerlo. No es tan fácil cambiar de zapatos y menos fácil es lograr que otro lo haga.

Toma la varita mágica del psicodrama, para que me acompañes en el segundo encantamiento.

¿Has tenido alguna discusión últimamente o un desencuentro? ¿Has querido ponerte de acuerdo con un compañero de trabajo, una hija, tus alumnos, una amiga y no lo has conseguido?

Imagina la escena: dónde estás, quiénes están, de qué están hablando. Deja correr la escena en tu imaginación. Llega a ese momento en que te sientes desesperado o desanimado por la discusión, por el desacuerdo. Quédate un momento con esos sentimientos.

Ahora, con una inspiración profunda, pásate a los sentimientos y pensamientos de tu interlocutor o interlocutora. Observa la escena desde allí. Experimenta tus sentimientos en este lugar. Mírate a ti mismo desde estos ojos. ¿Cómo te ves?

Vuelve a tu lugar. ¿Aprendiste algo? ¿Harías ahora algo diferente? ¿Dirías otra cosa?

Esto lo hicimos con imaginación, porque nos unen sólo estas páginas, pero podríamos hacerlo en acción, cambiando de lugar físicamente, moviéndote efectivamente al lugar del otro y viviendo el desencuentro desde ese lugar.

Este encantamiento es el de la inversión de roles. Es una de las técnicas básicas del psicodrama, una técnica que lo define. Te invitamos a aprenderla con nosotros, para instrumentarla en tu consultorio, en tus grupos, en tu salón de clase. No la pongas en práctica todavía. Los encantamientos tienen su tiempo, su fundamento, su proceso. Será emocionante aprenderlo, eso podemos garantizártelo.

Tercer encantamiento: la magia de lo cotidiano

Los magos verdaderos dicen que la magia se puede encontrar en todas partes, aún en lo más simple, aún en lo más cotidiano. ¿Lo puedes creer? Seguro que sí, porque alguna vez te fascinaste con una puesta de sol, y el sol sale y se pone todos los días, o porque te detuviste a mirar la sonrisa de un niño, el abrazo de dos amigos, a oler el aroma inconfundible del pan recién horneado o el café recién hecho o a escuchar el sonido ronco de un organito callejero.

Bueno, entonces acompáñame a apreciar las cosas cotidianas. Trae tu varita mágica, la vamos a necesitar.

Primero, llévame a un momento cualquiera del día de hoy, o de ayer. Uno de esos momentos que se repiten: el desayuno, la llegada al trabajo, el trayecto en el metro o en tu coche.

Detente ahí. Vamos a ensayar alguno de los encantamientos que ya sabes: amplía la cámara de tu imaginación, como si estuviera sucediendo ahora y trata de ver los detalles en los que hoy todavía no te has fijado, la temperatura, el olor, los objetos que hay a tu alrededor.

¿Hay alguna persona allí? ¿O un árbol, o un cuadro? Usa el encantamiento de la inversión de roles y date un momento para recibir un mensaje de estos personajes.

Ahora te enseño pequeños encantamientos nuevos: ponle volumen a tus pensamientos y sentimientos: es el encantamiento del soliloquio. Pon la escena frente a ti como en una pantalla y obsérvala como un espectador: éste es el espejo mágico. Pasa la acción en cámara lenta, o rápida, haz un zoom en un detalle de la escena o de la acción, como si fueras un editor de cine o de video.

¿Encontraste algo nuevo en esta escena de todos los días? ¿Aprendiste algo? Una dramatización mal hecha es apenas un simulacro de la vida, con la magia del psicodrama en cambio puedes aprender a recrear, ampliar y  profundizar los pequeños y grandes acontecimientos de las personas y los grupos.

Cuarto encantamiento: si le hubiera dicho…

¿Te has preguntado alguna vez: porqué no le dije…? ¿Por qué callé…?  ¿Cómo no se me ocurrió decirle…? O aún: ¿por qué no la abracé? ¿Cómo no le dije cuán importante era para mí?

Infinidad de veces nos hacemos estas preguntas. Muchas situaciones en la vida nos quedan sin terminar y no siempre tenemos una segunda oportunidad.

Este es el encantamiento de la realidad suplementaria, la segunda oportunidad que proporciona el psicodrama.

Prepara tu varita mágica y pídele que abra un espacio: que te lleve, por ejemplo a aquel lugar donde debiste haber ido y nunca fuiste o no pudiste llegar. Pídele ahora que te lleve a aquel momento en que quisiste decir algo y no pudiste.

El psicodrama crea este “como si”, esta semi realidad, esta realidad suplementaria en la que podemos dar el abrazo jamás dado, y decir las palabras nunca dichas.

Para que este encantamiento sea verdaderamente efectivo, puedes combinarlo con el de la inversión de roles, así puedes también recibir las palabras que nunca pudiste escuchar y sentir la mano que no llegó a tocar la tuya.

Puedes usar este encantamiento también en situaciones difíciles: decirle al jefe lo que tuviste que callar para no perder el empleo o devolver el golpe al atacante, ese golpe que evitaste para salvar la vida.

Aunque el psicodrama no te puede proporcionar siempre finales felices, o cumplir todos los deseos, te ayuda a completar lo inacabado, las despedidas no hechas, lo que debió haber sido y no fue.

Es un encantamiento delicado, no debes abusar de él ni usarlo improvisadamente. Ven a aprenderlo con nosotros en toda su magia para que el caleidoscopio de sus posibilidades se abra en tus manos como la baraja de un mago.

Quinto encantamiento: cambiar el futuro

Ya viste que hay encantamientos para ir al pasado, para cambiar el pasado, o por lo menos para cambiar nuestra relación con ese pasado, terminar pendientes, ponernos en paz con alguien.

¿Y qué te parecería ir al futuro? Si lo piensas bien, pasamos más tiempo en el futuro que en el presente, damos vueltas en la imaginación a las diferentes posibilidades y nos mortificamos pensando, ¿qué va a pasar?

¿Quieres hacer un viaje al futuro? Prepárate, tengo un encantamiento para eso. Supongamos que vas a dar un examen y te mueres de miedo, o vas a ir a una entrevista para solicitar un trabajo que te interesa muchísimo y no quieres fallar. O podrías tener que tomar una decisión muy importante que afecte intensamente tu vida.

Con la magia del psicodrama podemos hacer todos estos ensayos de vida, prepararte anímicamente para tu examen, ensayar la entrevista de trabajo, desplegar los diferentes escenarios a los que puede llevarte una decisión.

Las dramatizaciones del futuro nos permiten acercarnos a nuestras metas, encontrando los caminos y los recursos para hacerlo.
En el psicodrama, como en la vida, las tres dimensiones del tiempo se unen, de manera que el futuro no es un destino inexorable que nos espera al fin del camino, sino algo que podemos construir a partir del presente y con las experiencias del pasado.

¿Quieres ser un guía de los viajes al futuro? Ven con nosotros a aprender a usar esta maravillosa máquina del tiempo que es el psicodrama.

Sexto encantamiento: tener el valor de volver a soñar

Si me permites la redundancia, este encantamiento te va a encantar. En realidad, son dos encantamientos en uno, porque usamos la palabra soñar para dos cosas diferentes: soñar en la noche cuando dormimos y soñar nuestros planes y deseos.

Recuerda algún sueño de los que soñaste durmiendo. Puede ser un sueño que disfrutaste, pero esos son los menos. Puede ser un sueño divertido, pero que parece disparatado, o hasta un sueño de terror, de los que dan miedo y nos despiertan con angustia.

Cualquiera sirve. Recuérdalo y prepara la varita mágica para zambullirnos en el sueño. Fíjate donde estás, si hay alguien más. En los sueños los objetos y los animales pueden hablar. ¿Te suena familiar lo que dicen? ¿Te lleva el sueño a otra parte, a un lugar conocido?

Déjate llevar, es un sueño y algún mensaje te quiere dar. Aún los sueños más estrafalarios adquieren sentido cuando los ampliamos con este encantamiento.

¿Es una pesadilla? Anímate a enfrentarla. Estás protegido aquí, en psicodrama. Llega hasta el final de tu miedo o tu angustia, porque ahora viene lo bueno. Toma tu varita mágica y convierte tu sueño en un nuevo sueño. ¿No sabes cómo? Busca en tu bolsa, o en tu mochila, en tu bolsillo: si ahí estuviera tu equipaje de vida, ¿qué encontrarías? Seguramente cuentas con los recursos necesarios para convertir un sueño de terror en uno de esperanza.

Ahora sí, si ya tuviste la capacidad de soñar, podrás hacer la segunda parte del encantamiento y usar tu varita mágica para tus sueños despiertos, los de la vida. Y si quieres dar un paso más, ven con nosotros a aprender la magia necesaria para ayudar a otros a tener el valor de volver a soñar.

Séptimo encantamiento: la magia de un instante

Este encantamiento es breve, dura lo que dura un instante y sin embargo abarca el presente, el pasado y el futuro.

Escucha bien, tienes que estar atento, atento no a lo que piensas en tu cabeza, sino a lo que ves y lo que oyes. Todo encantamiento tiene sus exigencias.

Esto es algo que sucede en los grupos psicodramáticos, pero pasa también en la vida. El psicodrama es un método basado en la vida, de ahí su mágica eficiencia.

Recuerda algún momento de un grupo, en que todos están hablando de diferentes temas, hablan de muchas cosas, pero de pronto algo, que no parecía tan importante, se convierte en el tema principal. Es un tema que va surgiendo, como una plantita que va brotando.

Ten lista tu varita mágica, porque está por aparecer alguien que va a hacer propio el tema en su propia vida, o mejor dicho, alguien para quien ese tema está encarnado en su historia y va a hacer el gran regalo al grupo de compartirlo. Es el protagonista de psicodrama.

Fíjate como de tu varita sale un rayo dorado que enhebra, como un hilo en una aguja, el tema del grupo con la historia del protagonista.
Este es el instante, el momento, el agujero por el que vamos pasando en nuestro camino, en palabras de Moreno, el creador del psicodrama. Si coordinas un grupo terapéutico acá podrás dramatizar cuando tengas la formación para hacerlo, pero mientras, aprende a captar estos instantes, en cualquier grupo en que estés, o en tu vida.

Quizás nos lleve la vida entera ser verdaderamente los protagonistas de nuestra existencia, pero podemos captar estos momentos privilegiados, en que lo que pasa en el mundo se engarza con nuestra historia y podemos promover que los otros se nos unan en un compartir de verdad sobre los temas humanos que a todos nos involucran.

Por eso Moreno decía que el momento no es parte de la historia, sino que la historia es parte del momento. Y, te agrego yo, éste se abre hacia el futuro, un futuro que podemos construir juntos.

Entonces, si sientes que el psicodrama puede formar parte de un trabajo que te apasione y una vida intensamente vivida y cada vez más protagonizada por ti, no lo dudes, acá te esperamos, para que estos encantamientos y muchos otros estén contigo en todos los instantes importantes que no deben dejarse pasar.